Por Prensa
Marcelo Fuentes, electricista egresado del Liceo de Paillaco lleva 10 años sin conseguir trabajo. A pasar de vencer su discapacidad física, aprobar la educación secundaria y apoyar con lo que puede a su familia, aún no logra ser integrado laboralmente. Marcelo Fuentes Torres, es un paillaquino de corazón y ha vivido una historia llena de […]
Marcelo Fuentes, electricista egresado del Liceo de Paillaco lleva 10 años sin conseguir
trabajo. A pasar de vencer su discapacidad física, aprobar la educación secundaria y apoyar con lo
que puede a su familia, aún no logra ser integrado laboralmente.
Marcelo Fuentes Torres, es un paillaquino de corazón y ha vivido una historia llena de
esfuerzos de paz y alegría.
Marcelo padece un problema de motricidad para desplazarse. Actualmente, lo hace con
un grado importante de discapacidad, ayudado por un bastón ortopédico. Entró al Centro Teletón
de Santiago cuando tenía 5 años de edad, donde estuvo por espacio de 10 años, hasta 1991,
cuando fue trasladado a Puerto Montt donde estuvo hasta 1999.
“Yo partí a los 5 años en la Teletón, llegue arrastrándome ahí y con el pasar del tiempo
me fui recuperando y hoy se lo debo todo a ellos”, recuerda.
“A veces mi familia me tenía que dejar unos meses en Santiago, porque por razones
económicas no podía estar todo el tiempo… en el año 1991 me trasladaron a la Teletón de Puerto
Montt hasta el año 1999…tengo muy buenos recuerdo de la Teletón, ya que podía encontrarme
con personas igual que yo”, agrega Marcelo.
P-. ¿Dónde estudiastes?
R-. “Yo comencé en la escuela Roberto Ojeda de Reumén, luego me vine a estudiar a Paillaco en
el Liceo RAP donde me titule de técnico electricista”.
P-. ¿Te has desempeñado laboralmente después de que te titulaste?
R-. “No, yo creo que es por mi discapacidad, lo más cercano a trabajo que he tenido es una
oportunidad que me dieron en radio diferencia en épocas de estudio donde más bien yo iba a
“intrusiar” (soltando una risa) ahí tuve uno de mis mejores amigo, el flaco Andrés Gómez.
P-. ¿Hoy como vives, recibes ayuda de alguien?
R-. “Hoy vivo solo con mi mama, no recibo ayuda municipal, solo de una pensión asistencial.
P-. ¿Cuál es el sentimiento que te aflora cuando han pasado más de diez años sin poder
trabajar?
R-. “Bueno, uno de repente se bajonea por el hecho de no hacer nada, pero fue la vida que me
tocó. Me gustaría decirle a la gente que vea en los discapacitados a personas que también pueden
hacer algo”
P-. ¿Cómo ves tú el tema de la inclusión y la discapacidad en Chile y la comuna?
R-. “Creo que no se ha avanzado mucho al respecto, creo que la sociedad no está preparada para
atenderlos a nosotros o prestarnos una mano, a mi ya no se me hace tan difícil; pero para otras
personas si”
P-. ¿Haz sentido alguna vez algún grado de discriminación?
R-. “Recuerdo cuando joven, la primera vez que llegue al liceo me pegaron, pero luego ya fui
integrado y me sentí uno más, en la carrera me dejaban lo más fácil, todo lo de abajo enchufes y
eso porque no me puedo subir a un poste”
P-. ¿Qué necesitas en este momento?
R-. “Si me pueden ayudar con algo simple, a mi me complica, ojalá zapatos que tienen que ser
con caña y con lo que gano me veo alcanzado… Las fiestas de alguna manera las pasaremos.
P-. Para cerrar la nota ¿Te sientes una persona feliz?
R-. “La verdad es que si… he a sumido la vida que me toco vivir y he tenido mis propios logros”.