Por Prensa
La presidenta del movimiento ciudadano RecuperemosValdivia, Bárbara Klett, propuso una serie de medidas destinadas a combatir los microbasurales que han aumentado en los últimos años, principalmente, en los sitios eriazos. La estrategia va de la mano con la Ley 20.879 que sanciona a quienes arrojen basura en vertederos clandestinos o en sitios eriazos, con hasta […]
La presidenta del movimiento ciudadano RecuperemosValdivia, Bárbara Klett, propuso una serie de medidas destinadas a combatir los microbasurales que han aumentado en los últimos años, principalmente, en los sitios eriazos.
La estrategia va de la mano con la Ley 20.879 que sanciona a quienes arrojen basura en vertederos clandestinos o en sitios eriazos, con hasta 100 UTM.
“Esta normativa permite que sean sancionados con multas de van desde las 20 a 100 Unidades Tributarias ($ 850.000 a más de $ 4.200.000). Incluso, quien conduzca el vehículo que transporta los desechos al microbasural está expuesto a que se le retirará la licencia de conducir hasta por dos años y su vehículo sea incautado”, explicó Bárbara Klett.
La idea es implementar dispositivos de tele-vigilancia (cámaras) en lugares estratégicos donde se acumule basura de manera ilegal, siempre que la medida cuente con el respaldo de los vecinos. De esta forma se obtendrá un registró gráfico para poner las denuncias correspondientes en la municipalidad, a Carabineros de Chile o a la autoridad sanitaria, quienes remitirán los antecedentes al Ministerio Público o a los tribunales competentes.
La existencia de microbasurales en la proximidad de sitios poblados representa un grave riesgo para la salud de las personas, por cuanto constituyen un foco de insalubridad y de contaminación ambiental, publicó el 2010 la Revista de Salud Pública de la Universidad de Chile.
“Es fundamental entregarle a la comunidad herramientas que le permitan empoderarse en torno a este tema, por ello es fundamental el rol que cumpla el Departamento de Medio Ambiente a través de una estrategia de promoción”, explicó Bárbara Klett.
La líder ciudadana valoró la estrategia que han realizado otros municipios, como el Alto Hospicio quienes plantean realizar educación ambiental en los colegios y jardines infantiles y así fomentar el cuidado del medio ambiente; y también enseñar estos temas a la comunidad en general, mediante información en medios de comunicación locales y la participación en operativos en terreno, tales como ferias y barrios.
ARTICULACIÓN CON EL SECTOR PRIVADO
“La Municipalidad debe ofrecer a los privados realizar proyectos sociales transitorios en los sitios eriazos, para darle rentabilidad social, mientras deciden qué hacer con ellos comercialmente”, explicó Bárbara Klett.
Una opción es crear una mesa de trabajo destinada a definir cuáles serían los espacios de utilidad para levantar esas iniciativas, “de manera participativa y con respaldo de profesionales con experiencia en urbanismo social”, concluyó.
