Saturday, June 13, 2015

Artesanía en mimbre: “Una Cultura Heredada” en Pichirropulli que se niega a desaparecer

Por Prensa

En la localidad de Pichirropulli, www.lavozdepaillaco.cl  quiso rescatar, difundir y potenciar una actividad que cada día tiende a extinguirse y que es parte de nuestro patrimonio cultural, pero aquí existe una persona que se niega rotundamente a dejar morir este oficio y está dispuesto a compartir su conocimiento a más personas con tal de que […]

<p>Enjoyed this article?Subscribe and Follow me on Twitter.</p>
FOTO 1

En la localidad de Pichirropulli, www.lavozdepaillaco.cl  quiso rescatar, difundir y potenciar una actividad que cada día tiende a extinguirse y que es parte de nuestro patrimonio cultural, pero aquí existe una persona que se niega rotundamente a dejar morir este oficio y está dispuesto a compartir su conocimiento a más personas con tal de que no se pierda esta cultura del mimbre.

Ramón Antonio Castillo Rosas accedió a  comentar su experiencia: “yo tengo 61 años y vivo un poco más de treinta años aquí en Pichirropulli, comencé haciendo trabajos en mimbre desde los ocho años aprendí de mi padre, porque su familia también se dedicaba a esto, yo lo acompañaba a vender y salíamos con los canastos al hombro en ese tiempo, hoy gracias a Dios siempre he sobrevivido con altos y bajos pero bien, ahora tengo 61 años he criado a todos mis hijos (cinco) están grandes con decirle que el menor es carabinero en Futrono,  hoy trabajo con mi esposa (Marta Foitzik), he aprendido y hecho de todo en mimbre, muebles, canastos de todas medidas y formas, marquesas con veladores y recuerdo que antes se forraban las chuicas de vidrio, llegaban por cientos aquí, hoy ya no se conocen, es una lástima que hoy ya no exista el herrero por ejemplo, ellos tenían sus propios implemento y salían a herrar a todos lados, ahora existen cosas chinas, pero no es lo mismo en términos de duración, porque si los deja al sol se hacen pedazo en una semana, el mimbre no”.

Le preguntamos si siente que su oficio ha sido considerado dentro del catastro comunal cultural y sobre la posibilidad de ayudas, al respecto señalo:

“La verdad es que no a veces duele decir la verdad a mí nunca me han considerado, recuerdo que el único alcalde que me consideró fue en los tiempos de don Lalo Camino, que nos facilitaba camiones para llevar a los artesanos y a mí a las ferias y a la Saval con nuestros trabajo ese alcalde nos ayudo y nos instaba a hacer puestos en Paillaco, la semana paillaquina la llenábamos de trabajos de estos, nos pagaba los stand en Valdivia,  hoy uno va a la municipalidad y no pasa nada, yo por lo menos no he recibido  nada  y tampoco me han dicho usted puede exponer aquí en esos eventos como la Fiesta del Cordero”.

Solo queda sumar voluntades para no perder este patrimonio que tiene una compositiva entre lo tangible y lo intangible, la política cultural impulsada por el municipio se ve cuestionada frente al testimonio de nuestro entrevistado, que manifiesta la voluntad de entregar su conocimiento, solo queda generar las instancias para que esto no se pierda.

 

FOTO 1FOTO 2